Sintiéndolo mucho Noa ya no se encuentra entre nosotros debido a un accidente. Pero creo que se merece una despedida a lo grande. Fue una corderita prematura que nació en mayo del 2013, a la que tuve que dedicar durante dos meses atención casi 24 horas, dí el biberón cada 2 horas durante 30 dias pues comía muy poco. Siendo una corderita de un mes ya fue a visitar a los abuelitos de la residencia y los conquistó… Invertí tiempo en ella con la ilusión de que fuese una de las mascotas de la residencia, uno de esos animales que se destinan a hacer felices a otras personas, como son nuestros mayores. La enseñé a comer galletas, a hacerla  mansa pues Nayara es única para aborrecer a los animales, si superaba la prueba sería la oveja más mansa de la historia. Paseaba todos los días con mis perros, incluso se hizo amiga de las otras dos mascotas: la conejita y Pimkie. A los tres meses la llevé a la paridera porque no la podía seguir teniendo en casa a la espera de abrir la residencia y trasladarla a lo que iba a ser su hogar. Para mantener el vínculo cada domingo he ido a verla, la he sacado de paseo, he dado galletas y aunque no tuviese tiempo he pensado en que este sacrificio iba  a valer la pena, pues cada sonrisa de nuestros abueletes era el premio buscado. Llevaba una semana en su nuevo hogar con la cabrica enana Lucy, y eran la distracción de todos. Y este jueves 23 de abril….de tenerla  a mi lado en cuestión de minutos dejó de existir. Sentimos desolación e impotencia por arrebatarnos este maravilloso ser de nuestro lado…. Adiós Noa, puedes estar segura de QUE NUNCA TE OLVIDARÉ.